Hace
ahora tres meses nos congratulábamos por la noticia de que el anterior Concejal
Presidente de la Junta Municipal de Carabanchel abandonaba ese cargo para
incorporarse a la Comunidad de Madrid. En otra entrada anterior detallábamos
algunas de sus lamentables actuaciones, concretamente las relacionadas con la
demolición y el futuro de la cárcel de Carabanchel y su opinión sobre el
prometido y necesario hospital que debería haberse construido en el solar de la
misma.
Lamentablemente,
no parece que vayamos a mejorar mucho. El político elegido por el Partido
Popular para administrar el distrito en sustitución de Carlos Izquierdo ha sido
Manuel Troitiño, quien, en una entrevista concedida al informativo digital
Madrid Diario, nos hace entrever que poco o nada se va a corregir.
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Después
de un vergonzoso símil taurino, se descuelga con una afirmación que, para
quienes vivimos en el entorno de Carabanchel, nos irrita bastante porque se
aleja totalmente de la realidad: «En los últimos años, el distrito ha
recibido importantes inversiones, lo que nos permite decir que está
satisfactoriamente dotado». Suponemos que los pocos meses que lleva en el
cargo, además de ocuparlo a tiempo parcial –ya que igualmente ejerce de
Concejal Presidente en el distrito de Vallecas- no le han permitido asomarse a
la realidad de nuestros barrios.
El
resto de la entrevista deja en evidencia su total falta de concreción y, sobre
todo, la total contradicción con su afirmación anterior:
«…una fecha de puesta en
servicio que es final de año»
(refiriéndose a la biblioteca de San Isidro, totalmente acabada hace meses).
«Estamos expectantes con las medidas que haga
el Gobierno en relación al Cercanías» (respecto de la puesta en servicio de
líneas transversales de autobús entre Usera, Carabanchel y Latina, algo que es
atribución del ayuntamiento madrileño).
«El distrito está trabajando en propuestas
que trasladar al Plan General» (en relación con el futuro de la finca de
Vista Alegre, totalmente cerrada a los vecinos y reclamada por los mismos para
uso público desde hace años).
«Sacaremos a concurso en un tiempo razonable
muchas de las instalaciones deportivas» (respondiendo a la puntualización
del periodista sobre las quejas de los residentes sobre la de esos
equipamientos).
«Este asunto se trasladó a Fomento desde el
distrito. No sé más que eso, aunque con la situación económica, dudo mucho que
se resuelva pronto» (sobre la reclamación de soterramiento de la M-40).
Y,
por supuesto, su opinión sobre el futuro del solar de la cárcel: «En mi opinión, con la situación económica
actual, el Gobierno regional tendrá que pensarse muy mucho la construcción de
un nuevo hospital [..] habría que
estudiar cuál sería su uso alternativo, siempre respondiendo a las necesidades
del distrito». Es decir, después de más de trece años del cierre de la
prisión, y de tres años y medio desde su demolición, TODAVÍA NO SABEN QUÉ VAN A
HACER con esos terrenos…
¿De
verdad no había alguien más capacitado para dirigir el distrito de Carabanchel?